Con la actuación de Udimar continúo el ciclo que tuvo como predecesores a Misión Camila y Ramal, en los sábados anteriores.

En esta ocasión Udimar presento un nuevo integrante, Francisco “Joker” Santomil, sumándose a las voces; y como invitados estuvieron Yair Robetta leyendo algunos de sus poemas con el acompañamiento musical del grupo, y “Chiva” Meichtry aportando efectos desde la consola.

El público disfrutó, tanto adentro como afuera del salón, de un recital muy dinámico en el que alternaron temas propios –la mayoría-, y algunas versiones de canciones de otros músicos, además novedoso, especialmente por la inclusión de los efectos de sonido (lo que quizá provocó cierta confusión por momentos en algunos músicos y quizá también en parte del público, pero el balance final fue altamente positivo, máxime considerando que esta inclusión fue espontánea).