La Casita, centro de orientación y contención en consumos problemáticos, arribó a sus 5 años de vida, renovando el compromiso del equipo de trabajo y colaboradores, para continuar apoyando a las personas que atraviesan momentos difíciles y encuentran en ese espacio un lugar que abre sus puertas para recibirlos y ofrecerles una oportunidad.

A pesar de la lluvia, en el horario previsto, hubo una numerosa concurrencia. Durante la apertura con la presencia de familiares y público se hizo una radio abierta coordinada por la Directora de Desarrollo Humano, Lic. Anabel Massine y la Técnica en Comunicación Raquel López donde hicieron uso de la palabra varios integrantes de La Casita y del equipo que trabaja en ese ámbito.

Martina Raimondi, a cargo de arteterapia, agradeció la oportunidad de poder ofrecer su taller en un ambiente muy adecuado porque “se ha conformado un grupo muy unido para ayudar y acompañar en todo lo que está a nuestro alcance, por eso repito que pueden contar conmigo”.

La directora del Centro Nº24 que dicta cursos en los cuales participan algunos de los asistentes a La Casita señaló que es fundamental la función que cumple. A los chicos se los nota contentos y contenidos y estoy plenamente feliz de participar con la colaboración de Raquel López que dicta el “Taller de medios multimedial” y Florencia Koelbl que se ocupa de la enseñanza primaria para quienes están escolarizándose. Adelante, a seguir trabajando y que cumplan muchos años más esta hermosa Casita”.

La psicóloga Andrea Quinteros, Coordinadora de La Casita, dijo sentirse muy feliz y agradeció la presencia de la Defensora de Pobres y Menores, Dra. Victoria Federik, como así también a Celeste Yeri de ANAF. “La idea es que se sientan cómodos y vivan como lo hacemos nosotros en nuestro trabajo. Esto es un gran logro y como siempre les digo a los chicos que asisten acá que los protagonistas son ellos, en realidad son los que le dan vida, sin ellos este dispositivo no existiría”.

La profesional consideró que “se está entendiendo lo que significa este dispositivo que no tiene que ver con venir a juzgar sino a pensar juntos una nueva forma de vida para empezar a armar nuevos proyectos y saber que el pasado, o lo que hemos vivido, puede quedar atrás y siempre hay una nueva oportunidad”.

En la Casita convivimos diferentes objetivos porque acá funciona el punto de encuentro familiar con personas que también utilizan este lugar y nos encontramos con los chicos que vienen a hacer los talleres, incluso los chicos que vienen a la placita y solicitan que les demos agua. Apostamos a que se eduquen y sigan formándose laboralmente y es importante la participación de los centros educativos laborales acompañando con un recurso para tener algo que ofrecer. Este año se ha sumado un nuevo taller de arteterapia a cargo de Martina y todo esto les hace bien porque este es un lugar donde se pueden expresar y mostrar sus habilidades e intereses que tienen y eso nos asombra cada día, remarcó.

Teresa, aportó su reconocimiento, a 1 año de ingresar al equipo que apoya las tareas, mencionando que “es un espacio de compañía con las personas que trabajan, la Psicóloga Andrea Quinteros y la presencia de la responsable del área Anabel Massine”. Destacó a los chicos, “en especial Fede y Jesús que ayudaron a preparar el ámbito del agasajo que se realizó con motivo del aniversario”.

Cristhian Flores, Coordinador del Centro Comunitario Nº24, al tomar el micrófono expresó: “Esla primera vez que vengo a La Casita, excelente lugar y se ve la contención que realizan. Considero que el taller de Raquel es muy importante, como así también la enseñanza primaria de Florencia. Es un espacio amigable y es ideal para compartir estas experiencias para quienes deseen acercarse y hallar un camino nuevo para sus vidas”.

La Directora de Desarrollo Humano, Anabel Massine, dijo que “La Casita es una experiencia que empezó hace más de 5 años porque existía una propuesta de trabajar, teniendo en cuenta estas problemáticas que atraviesan a toda nuestra comunidad y era difícil contar con un espacio donde abrir las puertas, escuchar, contener y orientar en las necesidades que necesitaban de la articulación con otras instituciones y por suerte tuvimos la buena aceptación de la comunidad”.

“Actualmente el trabajo que desarrollamos en La Casita se pudo concretar con la creación de este espacio y la articulación con otras instituciones a través de un espacio de escucha abierto a todas las personas que sienten la necesidad de acercarse sin ningún tipo de discriminación para que nadie se sienta excluido y que este espacio se para poder entendernos entre todos”, agregó.

Finalmente agradeció el apoyo del municipio, principalmente de nuestra intendenta, sería muy difícil llevar adelante esta política pública y social, como así también una cantidad de otros trabajos que venimos no solo es una dirección sino con el acompañamiento de otras direcciones del municipio y otras instituciones de la ciudad y eso es fundamental porque, sino sería muy difícil poder llevar a cabo este espacio”.